Ya os había contado que estaba un poco tristona porque se cerró prácticamente mi etapa de quidditch. Que de todos modos, poco más me quedaba porque yo me veía ya muy fofa y mayor para estarme enfrentando a niños de 20 años super fit. Ya tengo mis dolores, taras y demás por la edad. Pero eso sí, la confianza y la autoestima que te da el quidditch… pocos más sitios te la dan. He sido muy feliz con el quidditch, por eso me da tanta pena no poder estar ahí esta temporada.
Como ya tengo una edad y no quería quedarme sin hacer deporte, he decidido probar una clase de ballet de adultos en un gimnasio más o menos cercano a mi casa. Estará a algo menos de 2 km de mi casa. Por lo que los días que no llueva podré volver andando a casa, aprovechando que ya tengo los músculos calientes. Actualmente ente estoy andando muchísimo más, pero cuando esté estudiando no quiero volver a estar 2 o 3 meses encerrada todo el día picando código sin levantarme. Os parecerá una tontería, pero cuando pagas una mensualidad, no quieres perder el dinero y vas. O al menos yo funciono así. Por no perder el dinero lo que sea.
Pensé que no podría hacer casi nada en clase de ballet, pero pude con casi todo. Donde si vi que mi cuerpo se resentía era en los saltos. Obviamente, no puedo hacer tantos saltos como cuando tenía 9 años y llevaba 5 años en el ballet, y además, no levantaba todo este peso corporal. Pero por el resto, mantuve bastante bien el tipo. La profesora incluso me dijo que muy bien que fuera capaz de seguir todo (con mis limitaciones, obvio, yo ahora mismo no te hago una 5 posición y no abro la pierna 90 grados lateralmente). Me dio muchos ánimos. Además como no es ambiente de conservatorio (o al menos no es conservatorio años 90 y profesores rusos) nadie me ha mencionado mi gordura, o mi atuendo. Porque cuando iba al conservatorio a ballet si que te obligaban a levar un “uniforme” fueras o no por oficial en los estudios. Aún me acuerdo perfectamente: maillot negro manga francesa, medias rosas y zapatillas de piel carne suela entera. Ah, y para las actuaciones tenías que ponerle cintas a las medias puntas.
Creo que mientras no adelgace no voy usar maillot de nuevo, porque tampoco sé donde comprarlo. Vale que solo vi en decathlon y ahí no me entraron (o los que vi para probar) y luego en internet vi alguna tienda… pero no me convence la medida que tiene, y sin probar me parece demasiado riesgo. Porque como comprenderéis al ser ropa de talla grande y no masiva moda rápida no es barata. No sé si en alguna tienda de ballet local encontraré algo, pero llevo casi 20 años alejada del ballet, las tiendas que conocía cerraron todas. Al menos tengo zapatillas de media punta, del decathlon, obvio.
De verdad, no sabéis que contenta estoy. El día que mis padres me quitaron de ballet para meterme en conservatorio de música ( sí, salí de un conservatorio para meterme en otro… solo cambié de carrera), me pillé un rebote fino que creo que lleva 20 años XDDDD. Sé que seguramente no llegaría a primera bailarina en ninguna compañía, pero no sé. Creo que si hubiera seguido entrenando tanto el cuerpo tendría otro cuerpo, literalmente. En fin, el conservatorio de música fue una experiencia preciosa. Me gusta mucho todo lo que tenga que ver con la música clásica y todo eso.
Además, creo que la profesora es fan de los Bridgerton, porque nos pone ese tipo de música. Canciones modernas que han sido versionadas en instrumental con grupos de cámara. Es un ambiente ideal, en serio, me encanta todo esto.
Así que mi consejito del día es el siguiente: no os limitéis por el comentario de nadie ni por el cuerpo que tengáis. ¡A tope con vuestros gustos, sueños y hobbies!
Tened un buen fin de semana.